En el único hospital psiquiátrico del país, hay al menos 321 personas que siguen internas con discapacidad social, y más de 500 trabajadores entre enfermeros, personal médico, de cocina, seguridad y administrativo. Un trabajador de este hospital a quien entrevistamos y por temor, prefiere que no se revele su identidad, se encuentra preocupado por el nivel de riesgo en el que se encuentra el personal y los pacientes. La alarma se debe a que el 21 de abril 2020 trascendió entre el personal, que dos de los enfermeros que atienden el pabellón 2, presentaban síntomas de COVID-19, lo mismo que una trabajadora social. Este pabellón es uno de los dos llamados “intensivo” de hombres, en el que se encuentran pacientes con enfermedades psiquiátricas crónicas. En cada uno de estos dos pabellones hay al menos 40 personas internas.

La periodista Rolanda García visitó este miércoles 1 de abril el hospital regional de Ixcán, Quiché. Durante su cobertura periodística captó las condiciones en las que se encuentra uno de los principales centros de asistencia, y registró el abandono del sistema de salud pública.

El secretario de comunicación de la presidencia, Carlos Sandoval, informó la tarde del 1ero de abril de 2020, que el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) atiende a pacientes con COVID-19 en tres hospitales: hospital de Villa Nueva, en el hospital temporal del Parque de la Industria, en la zona 9, y 2 pacientes en un sanatorio privado.

La única manera de combatir el contagio de coronavirus en sistemas de salud precarios y con graves deficiencias como es el caso de Nicaragua es con una estricta cuarentena, esto significa que todas, pero todas las personas deben quedarse en sus casas evitando contacto, esta medida, de acuerdo a la experiencia, frena el avance exponencial del contagio del coronavirus.