Ana López al frente de la Seprem rompe el techo de cristal
Foto: Articulación y Diálogo de organizaciones de mujeres y parlamentarias indígenas.
Por primera vez desde su creación, en el año 2000, la secretaria Presidencial de la Mujer (Seprem) será una mujer indígena: Ana Prudencia López Sales, maya Mam, licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales. El 10 de abril, López Sales fue juramentada después de que las representantes de los Consejos Departamentales de Desarrollo se pronunciaran para pedir mayor transparencia y participación en el proceso de selección, que, señalaron, excluye a las mujeres de los territorios y a las mujeres indígenas.
Por Jasmin López
El nombramiento de Ana López como titular de la Secretaría Presidencial de la Mujer (Seprem) es un logro histórico. Ella es originaria de Huehuetenango. Tiene una maestría en Derechos Humanos y Derecho Penal y estudios doctorales en Derecho Constitucional. Fundó la Asociación de Abogadas Indígenas Chomija, con el objetivo de brindar asesoría jurídica especializada a las mujeres y a los pueblos indígenas.
En el 2024, logró convertirse en la primera mujer indígena en integrar las Comisiones de Postulación para renovar las Cortes del país.
“La intención de haber tomado la decisión de postularme para ser secretaria de la Secretaría Presidencial de la Mujer es venir a trabajar para el fortalecimiento institucional de la Seprem, para poder llegar a todas las mujeres guatemaltecas, a todas las mujeres mayas, garífunas, Xinkas en los territorios de los 22 departamentos”, expresó López en su discurso luego de tomar posesión.
La nueva secretaria destacó la urgencia de descentralizar el trabajo de la Seprem para que las políticas públicas en favor de la equidad de género y el desarrollo integral de las mujeres lleguen a todos los territorios del país.
Varias organizaciones civiles por los derechos de las mujeres celebraron el nombramiento de López, que constituye un logro histórico.
La incidencia de las mujeres de los territorios
López Sales fue elegida luego de que representantes de los Consejos Departamentales, Regionales y Nacionales de Desarrollo Urbano y Rural demandaran que se tome en cuenta la participación de las mujeres indígenas y mujeres provenientes de los territorios no metropolitanos, tanto en el mecanismo de selección como en las candidaturas.
En los casi 25 años de existencia de la Seprem, la Presidencia de la República de Guatemala no había elegido a una secretaria de origen indígena. Las organizaciones denunciaron que todo el proceso está centralizado al no incluir a las organizaciones de los departamentos y no tomar en cuenta las condiciones que enfrentan para asistir a las convocatorias que son distintas y más difíciles que las de las mujeres que viven en la capital de Guatemala.
El 25 de febrero, el ministerio de Gobernación aprobó nuevas reformas al proceso de selección para la Secretaría y Subsecretaría Presidencial de la Mujer. Aunque estas modificaciones, recogidas en el acuerdo gubernativo 31-2025, tenían la intención de asegurar la idoneidad de las candidatas al cargo, son excluyentes y discriminatorias, denunciaron las lideresas.
Los requisitos “son más altos que los que se piden a los diputados”, expresó Claudia Lepe, representante del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano y Rural (Conadur). Las postulantes deben ser mayores de 30 años, contar con colegiado universitario activo y documentos académicos certificados por un abogado, entre muchos otros. Además, la papelería se recibe sólo en la zona 1 de la ciudad de Guatemala, lo que representa para las candidatas del interior una inversión de tiempo y dinero -en transporte, alimentación, hospedaje- que muchas veces no pueden permitirse, explicó Lepe.
Las lideresas presentaron propuestas para fortalecer la transparencia e igualdad en el mecanismo de selección, entre ellas:
Que se reconozca la legitimidad de las representantes territoriales de los Consejos de Desarrollo, garantizando su participación activa en el proceso, habilitar la recepción de papelería en las gobernaciones departamentales y hacer públicas las ternas de candidatas.
La Presidencia únicamente accedió a integrar a las representantes como observadoras de la elección, ampliar la fecha límite de la convocatoria y recibir los expedientes en las gobernaciones departamentales.
Aunque estos acuerdos fueron insuficientes y poco efectivos debido a la falta de coordinación institucional, sus recomendaciones pusieron el foco en la importancia de tomar en cuenta la diversidad de voces y experiencias para este cargo.