Mujeres quichelenses reivindican la lucha por la igualdad desde su profesión

Petronila Aj, comunicadora comunitaria, Norma de Paz, docente universitaria, Hermelinda Morales, jueza de Paz y Esmeralda Soc, representante de organizaciones de mujeres ante el CODEDE relatan experiencias y las barreras que han enfrentado para desempeñarse en sus respectivas profesiones en el departamento de Quiché.

En el marco del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, presentamos sus historias

Por Julián Ventura

A pesar de los desafíos que enfrentan las mujeres en participación y representatividad en cargos importantes dentro del sector público o privado, día a día las guatemaltecas luchan por abrir la brecha y empoderar a las más jóvenes. Esto lo reflejan las historias de Catalina Soc, Petronila Aj, Hermelinda Morales y Norma Paz, originarias de Quiché.

Soc, Aj, Morales y Paz se desempeñan en el ámbito político, cultural, judicial y educativo en su departamento.

Cada una relata los desafíos a los que se enfrenta diariamente cada una, pero coinciden en que la educación, el empoderamiento y el acceso a la información en su idioma materno y castellano forman parte de las estrategias para promover una mayor participación de las mujeres desde sus comunidades hasta llegar a altos cargos institucionales. Estos son sus relatos:

“El conocimiento fortalece la participación de las mujeres”

Catalina Esmeralda Soc Carrillo, es representante de organizaciones de mujeres ante el Consejo Departamental de Desarrollo Urbano (CODEDE) en el departamento de Quiché, así como del Consejo Regional de Desarrollo Regional en Guatemala (COREDUR) y el Consejo Nacional de Desarrollo Urbano y Rural (CONADUR).

Estar en este cargo lo define como un “espacio fuerte” para las mujeres debido a los desafíos que se enfrentan. Su liderazgo la ha llevado a sobresalir en estas instituciones del Estado.

Soc Carrillo es originaria de la aldea Chuicojonop, municipio de Patzité, Quiché. Se graduó de trabajadora social con una licenciatura de la Universidad Rafael Landívar. Actualmente, tiene 31 años, está casada y es madre de dos hijas. Uno de los caminos que la condujeron hasta su actual cargo fue observar la trayectoria de su madre quien también forma parte de una organización de mujeres. “Es una fortaleza para mí”, relató.

Catalina Esmeralda Soc tiene participación en varios espacios de Patzité, Quiché. Foto: Cortesía

Además, desde su experiencia, consideró que la voluntad y conciencia política son aspectos clave que para que las mujeres jóvenes se involucren en estos espacios. En 2024, representó a la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala (CONAVIGUA) a través del Enlace Continental de Mujeres Indígenas de Las Américas (ECMIA) en la 66ª reunión de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, realizada en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ubicada en Chile.

“Mujeres enseñemos a otras mujeres a empoderarse”

El acceso a la justicia en Guatemala enfrenta desafíos como la impunidad. Sin embargo, desde el punto de vista de una jueza también el machismo es una barrera con la que deben lidiar las operadoras de justicia.

“Las personas no ven a bien que una mujer esté en un juzgado porque piensan que uno está a favor de la mujer. Sin embargo, trabajamos con base a la ley”, comentó Hermelinda Morales Canil, al relatar su experiencia como jueza de Paz en el municipio de Patzité.

La jueza Hermelinda Morales tiene una larga trayectoria en el sistema judicial. Foto Cortesía

Durante su trayectoria laboral, Morales, quien es maya hablante K’iche’, ha ocupado diversos cargos dentro del sistema judicial, entre ellos: comisaria y oficial en el Juzgado de Primera Instancia de Familia del departamento de Quiché, secretaria en el Juzgado de Primera Instancia Penal de Delitos de Femicidio y otras formas de Violencia contra la Mujer en Quiché, jueza de Paz en el municipio de San Juan Cotzal y actualmente es jueza de Paz en el municipio de Patzité, departamento de Quiché.

Para ella, el empoderamiento es fundamental y señaló la importancia de que “mujeres enseñemos a otras mujeres a empoderarse”. Desde su experiencia también visibilizó el idioma como uno de los retos en cuanto al acceso a la justicia, sobre todo para las mujeres indígenas.

“No nos quedemos calladas”

Norma de Paz es licenciada en Administración de Empresas y cuenta con una maestría en Desarrollo Humano y otra en Docencia Superior. Actualmente, se desempeña como docente universitaria. Además, ha trabajado en diferentes espacios donde promueve el desarrollo personal y profesional de las mujeres y juventudes con una actitud optimista y positiva.

La docente coincide en que un “gran desafío” para las mujeres es que la sociedad aún dude de las capacidades que pueden aportar a puestos clave en organizaciones, instituciones públicas o privadas, entre otros espacios de influencia.

Norma de Paz es docente universitaria en el departamento de Quiché. Foto Cortesía

“Definitivamente una mujer es fuerte, audaz y hoy en día podemos observar que muchas mujeres han liderado grandes organizaciones”, agregó.

Además, motivó a que pese a las adversidades o barreras que surjan, “no nos quedemos calladas y sigamos adelante demostremos que con problemas podemos llegar a ser grandes”.

“El 8 de marzo es para seguir conmemorando la lucha de las mujeres”

Petronila Aj Moreno es una joven profesional guatemalteca del pueblo maya K’iche’, destacada en el ámbito de la comunicación. Su versatilidad se refleja en múltiples facetas incluyendo su labor como conductora de eventos, maestra de ceremonias socio culturales y presentadora en festividades patronales.

Además de su formación académica, Petronila ha enriquecido su experiencia a través de capacitaciones alternativas al participar activamente en organizaciones de mujeres tanto a nivel nacional como internacional.

Actualmente, representa a la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala (CONAVIGUA) en un intercambio internacional de saberes. Esta organización, fundada en 1985, se creó para denunciar la exclusión, exigir la desmilitarización y denunciar las violaciones a los derechos humanos de viudas y huérfanos durante la guerra interna.

La participación de Petronila en CONAVIGUA y su compromiso con la comunicación comunitaria resaltan su dedicación al fortalecimiento de la identidad cultural y la promoción de los derechos de las mujeres indígenas.

En su trayectoria se ha enfrentado a la discriminación por su origen indígena. Sin embargo, resaltó que la confianza en ella misma le ha ayudado a superar esos comentarios.

Petronila Aj recordó que el 8M también es una fecha para recordar que las mujeres deben continuar capacitándose e involucrarse en espacios de liderazgo.