“La vida se teje y se defiende”: festival de tejeduría busca dignificar el valor de las tejedoras en Alta Verapaz
Foto: Yeimi Alonzo
En el municipio de Tactic, Alta Verapaz, se llevó a cabo en el marco del Día Internacional de la Mujer, el Tercer Festival de Tejeduría convocando a más de 500 tejedoras de la región con el objetivo de defender los derechos textiles que han sido plagiados, la revalorización del mismo, la revitalización de la economía de las mujeres y del municipio, así como la sensibilización sobre el trabajo y dedicación que tiene este arte.
Por Yeimi J Alonzo
La actividad se desarrolló en las instalaciones del Balneario Chamché el cual está rodeado de naturaleza y ríos de agua helada que caen en diferentes pozas desde lo alto de las montañas. Desde la entrada se pueden observar la diversidad de hilos, formas y combinaciones de colores vibrantes en los telares que nacen de la cintura de cientos de mujeres formándose así una galería de arte y cultura viva.
El primer festival se originó en 2023, en la reapertura posterior a la pandemia del Covid-19 para promover la economía de las mujeres y motivarlas a defender los derechos textiles que han sido plagiados. La organización Baatz, la Asociación de Artesanas Textiles Nu’kem y la Cooperativa Ixoq Aj kemol iniciaron el movimiento y a raíz de ello tuvieron la presencia aproximada de 200 mujeres.
“Nos costó mucho organizarlo en el marco del movimiento de las tejedoras para la defensa del tejido, y aún más de la técnica y diseños de las mujeres que son de inspiración propia. Estamos defendiendo ante el plagio y el tema de subliminado. En esa línea, empezamos a hacer como un movimiento, pero para que se escucharan nuestras voces teníamos que hacer algo y a raíz de eso se logró hacer el primer festival, un evento que surgió de las tres organizaciones”, contó Dilia Margarita Có Coy, que este año participó en su rol de gobernadora departamental.
El segundo festival se realizó el año pasado con apoyo de diferentes organizaciones para sufragar con gastos económicos y apoyo a las tejedoras para lograr hacer gestiones preservando los objetivos del festival.
“Hemos reenfocando el trabajo de INGUAT (Instituto Guatemalteco de Turismos) que anteriormente era más para folclorizar pero estamos sensibilizando al INGUAT que se sumó y están respetando el objetivo de este festival bajo el lema: la vida se teje y se defiende”, dijo Có. El nombre tiene el objetivo de resaltar la defensa y resistencia ante las grandes industrias. Agregó que también que el tejido es parte de la resistencia política y económica como mujeres en el territorio.
Foto: Yeimi Alonzo
“Hoy contabilizamos alrededor de 500 mujeres, sin contar a las niñas, por lo que estuvieron cerca de 800. Logramos gestionar apoyo ante el Ministerio de Economía y Coopsama (una cooperativa) que nuevamente se sumó. Estamos entregando una materia prima para que la mujer inicie a tejer y el fondo del güipil que ellas van a complementar, es un apoyo que se está dando, esperamos gestionar más”, comentó la gobernadora.
Por otro lado, Glenda Roxana Caal originaria de la aldea Guachipac, Tactic, Alta Verapaz, resaltó la importancia de involucrar a las niñas en la actividad ya que forma parte de la herencia de los antepasados.
Proponen nueva iniciativa de ley
El próximo 19 y 20 de marzo, mujeres de todo el país se reunirán en el encuentro nacional de tejedoras donde presentarán una nueva iniciativa con algunas mejoras y otros elementos que quedaron fuera de la iniciativa 6136 que presentaron anteriormente para la protección de sus derechos.
“En este momento nos estamos reinventado en relación a la iniciativa de ley. Creemos que es muy importante el papel político que tienen los diversos funcionarios desde el Legislativo hasta el judicial, porque no puede esperarse más para que la propiedad intelectual colectiva se proteja. Necesitamos avanzar porque en 2017 planteamos un amparo por la folclorización que se hace desde el Estado de Guatemala sobre nuestras imágenes y los tejidos, a partir de ahí, hay una sentencia de la Corte de Constitucionalidad que habla de la necesidad de respetar los derechos de las mujeres, nuestras decisiones y también nuestro derecho de imagen y la no folclorización desarrollada en diversos planes, políticas, proyectos, programas, por ello es la necesidad de implementar esta sentencia a partir del INGUAT para que este establezca un mecanismo de participación efectiva de los pueblos indígenas para el diseño y formulación de esas políticas”, explicó la abogada expositora
Por aparte, Casilda Marisol Xoná Quej, de la Asociación de Brillantes Artesanas y Tejedoras Batz, indicó que uno de los grandes objetivos como organizadoras está por cumplirse al ser este festival ya reconocido nacionalmente.
“Para nosotros es un gran orgullo saber que nuestra lucha y nuestra voz está llegando a diferentes entidades gubernamentales y no gubernamentales. También estamos viendo la visita de extranjeros ya que no es algo de folclor sino de lucha, de la protección de nuestros derechos intelectuales llevamos mucho tiempo con esta lucha. Tenemos el objetivo de que le den el sí a nuestra ley, llevamos tres años en esto, esperamos que el otro año sea la celebración del sí a nuestra iniciativa”, manifestó.
También compartió que en años anteriores en el primer festival tuvieron el comentario de algunos intermediarios comerciales que dijeron que por el festival había subido el precio de los tejidos, pero no es que hayan subido los precios, es que ahora se ha empezado a dignificar y valorar el trabajo real de las tejedoras. “Ese es el objetivo, que se dignifique y se protejan los derechos intelectuales de los pueblos indígenas no solo de Tactic, sino del lado oriente y de todos los rincones escondidos del área de Guatemala”, añadió.
Luego de la socialización de la iniciativa y mientras las tejedoras creaban patrones con figuras cargadas de simbolismos, se realizó un taller sobre la teoría del color, además de una pasarela con la exposición de diversas piezas de tejido y diseños.
El tejido dentro de la cosmovisión del pueblo maya
“A través de los tejidos se visibiliza la cosmovisión, cultura, ideas y esencia. Por ello, al portar la indumentaria podemos reivindicar nuestra cultura”, expresó Silvia Nicolás, visitante desde San Pedro Soloma Huehuetenango, quien gustó de comprar algunas piezas durante la exposición de tejidos.
Lisbeth Nicolas, también de San Pedro Soloma, quien porta la indumentaria de su lugar de origen, contó que la actividad le pareció reflexiva por destacar a las mujeres que tejen y plasman sus ideas desde su cosmovisión como la dualidad maya y la esencia de ser mujer.
Mientras, Sharly, originaria de Santa Cruz Verapaz y mujer maya Poqomchí, expresó que en esta ocasión participó como voluntaria y resaltó que el telar de cintura es un trabajo que no se valora, no se profundiza ni se toma en cuenta la creatividad, el esfuerzo y la paciencia de las tejedoras. “Es un trabajo que como se hace en el hogar no se le da la valoración necesaria. El hecho que aquí se visibilice y que vean el esmero, la creatividad, el tiempo, la dedicación que las mujeres pusieron en sus tejidos representa un poquito de todo lo que conlleva. Es muy importante hacer visible todo eso porque es parte de nuestra cultura no como folclor o como propaganda turística sino como parte de nuestra historia”, indicó.
Claudia Aracely Isem es una de las tejedoras que participó en la actividad. Ella vive en la aldea Guaxpac y también comentó que algunos tejidos tardan alrededor de dos meses para su elaboración. Además, el costo también aumenta según el material que se utiliza como la lustrina suiza. “Tenía siete años cuando aprendí a tejer en mi familia y de ahí empecé solita y aprendí de todo. Lo que más me gusta es tejer, tengo una hija y ya le enseñé a tejer también”, comentó.
El Festival de Tejeduría en el marco del 8M
Para finalizar, las organizadoras indicaron que quisieron darle a este evento la resistencia de lucha por los derechos de las mujeres, especialmente en el marco del 8 de marzo.
“Sabemos que este día es muy importante para seguir exigiendo nuestros derechos especialmente como mujeres tejedoras, porque sabemos que se nos violenta al momento en el que no valoran nuestro tejido, cuando nos piden rebajas. Al final el hilo es lo más económico que podemos conseguir, pero el tiempo invertido, toda la historia, todas las figuras que conlleva la elaboración de un güipil, es importante que nosotras como mujeres tejedoras también le demos ese valor”, se escuchó a través de un altavoz.
“Hacemos un llamado porque lastimosamente en Alta Verapaz tenemos los primeros índices de violencia contra la mujer, es muy triste y lamentable porque hay muchas de nuestras compañeras mujeres que quizá en este momento se encuentran tejiendo en su casa viven violencia física, psicológica o patrimonial, y este día exigimos que hagan valer también sus derechos, que puedan ellas ser valoradas en los diferentes espacios donde puedan estar”, continuaron expresando.
El primer paso para visibilizar el trabajo fue lograr que la municipalidad creara este festival y que las organizaciones de mujeres lo realicen. Ahora, los siguientes pasos serán continuar fortaleciendo las capacidades y conocimientos de las mujeres para defender sus derechos. “Anteriormente las mujeres casi no usábamos nuestra indumentaria porque nos daba pena, hoy podemos ver que muchas portan su traje y eso es parte del conocimiento y fortalecimiento y la resistencia, vamos a seguir fortaleciendo el trabajo comunitario”, concluyeron.