La legislación sobre aborto ha avanzado en 3 países latinoamericanos en los últimos 4 años. Mientras tanto, en otros territorios, las luchas de las mujeres por el derecho a decidir continúan. En el marco del Día de la Acción Global por un Aborto Legal y Seguro, el 28 de septiembre, Ruda te comparte una radiografía de la situación en el subcontinente. 

El acceso al aborto es legal en 5 países en Latinoamérica. En Cuba, desde 1965,  se creó una base legal que permite practicar el aborto bajo atención del  Sistema Nacional de Salud y antes de la doceava semana de gestación. Funciona sobre cuatro principios: debe realizarse con la autorización de la persona gestante, en una institución hospitalaria, de forma gratuita y por personal médico. “En la isla el aborto no es un tema tabú”, señaló Ailynn Torres Santana para el medio de comunicación feminista Latfem.

En Guyana, la interrupción voluntaria del embarazo, antes de la doceava semana, es legal desde 1995. Este fue el primer país en Sudamérica en despenalizarlo. En Uruguay, está despenalizada desde 2012. Sin embargo, en algunas regiones de ese país, los médicos se han declarado “objetores de conciencia”, por lo que las usuarias deben ser trasladadas a otras localidades para abortar. 

Después de años de lucha el movimiento feminista de Argentina, denominada Marea Verde logró despenalizar el aborto durante las primeras 14 semanas de gestación en el 2020. La iniciativa había sido ya rechazada en 2018, pero obtuvo 38 de los 68 votos del Senado. Pero tres años después, las mujeres continúan siendo revictimizadas por el personal de salud al buscar abortar, especialmente, en regiones culturalmente conservadoras. 

Colombia dijo sí al derecho a decidir en el 2022. La Corte de Constitucionalidad aprobó la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 24 de gestación. Este fallo fue una respuesta a una demanda presentada por Causa Justa, movimiento integrado por 90 organizaciones de mujeres y feministas que exigían el fin de la criminalización por abortar. Las jóvenas jugaron un rol importante en esta lucha. 

México ha despenalizado el aborto en 12 entidades. En agosto, Aguascalientes despenalizó el aborto como respuesta a un amparo presentado por las organizaciones civiles CECADEC, TERFU AC, Cultivando Género AC, Morras Help Morras y el Grupo de Información en Reproducción Elegida (Gire). El objetivo de ese recurso legal era “que todas las mujeres y personas gestantes tengan acceso a abortos seguros sin ser criminalizadas”, señaló Gire.

El 6 de septiembre, un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación obligó a que cualquier institución de salud federal preste el servicio de aborto en todo el país. Ahora, ninguna mujer o persona con capacidad de gestar será castigada por abortar o practicar un aborto en estas instituciones. Aunque aún falta para lograr la despenalización total, México está cada vez más cerca de hacerlo.

El desafío: la despenalización total

El aborto está penalizado en todas sus causantes en 8 países latinoamericanos: Nicaragua, Honduras, El Salvador, Haití, Jamaica, República Dominicana y Surinam. En algunos de ellos, como El Salvador, diversas mujeres se encuentran en prisión cumpliendo una sentencia por haber interrumpido su embarazo voluntariamente y por diversas causas. En 2020, el Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria de la Organización de Naciones Unidas (ONU) se pronunció frente a la detención de 3 mujeres salvadoreñas encarceladas por abortar. Calificó sus detenciones como “arbitrarias”, solicitó a las autoridades su liberación inmediata y les exigió que las indemnice por los daños ocasionados y se realice una investigación exhaustiva. El Salvador ignoró estas solicitudes. 

El Estudio titulado Del Hospital a la Cárcel recopiló 181 casos de mujeres procesadas por abortar o sufrir una emergencia obstétrica en El Salvador. En el período 2020-2022, se reportaron 197 casos más. Ahora, el caso fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) para el caso Beatriz vrs. El Salvador podría sentar un precedente para el derecho a decidir en el país. 

En el resto de países latinoamericanos, la interrupción voluntaria del embarazo está despenalizada según causales. Es decir, por condiciones específicas en el embarazo. En algunas regiones, es permitido interrumpir el embarazo por malformación del feto o cuando la vida de la mujer corre riesgo. Este es el caso de Guatemala, Costa Rica, Paraguay, Perú, Ecuador y Venezuela. 

En otros países, como Panamá, Chile y Bolivia, interrumpir el embarazo de manera voluntario además está despenalizado cuando el embarazo es producto de una violación. Sin embargo, el proceso para verificar la existencia de estas causalidades en el embarazo es revictimizante y condiciona el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo, según señaló la feminista Ximena Aguilar en entrevista con Ruda. 

Según Aguilar, el objetivo debe ser lograr la despenalización total. Para ello, las mujeres organizadas continúan realizando acciones colectivas en todo el subcontinente. En Costa Rica, las mujeres organizadas por medio del colectivo Aborto Legal Costa Rica, han presentado diversas iniciativas ciudadanas para garantizar el derecho a decidir. En Venezuela, la plataforma Ruta Verde, conformada por 25 organizaciones sociales, recogieron 21 mil firmas que adjuntaron en un proyecto de ley sobre derechos sexuales y reproductivos en 2022. En Ecuador, este 27 de septiembre la Corte de Constitucionalidad conoció una demanda por incumplimiento presentada por organizaciones de mujeres que busca que el aborto por causales, como malformaciones congénitas, sea despenalizado. 
Aún en contextos represivos y hostiles, las mujeres de Abya Yala se continúan organizando y realizando acciones ciudadanas o legales para lograr que sus países transformaren la legislación sobre aborto. Este 28 de septiembre, se realizarán múltiples manifestaciones, plantones y movilizaciones en la región. 

En Guatemala, el Bloque de Jóvenas convocó a una movilización el 29 de septiembre a las 15:00 horas. Las participantes se reunirán en la 18 calle del Centro Histórico de la capital.